Llevo un verano haciendo un montón de DIY o manualidades sencillas con el fin de reciclar y reutilizar un montón de objetos que tenemos por casa y que suelen acabar en la basura una vez que cumplieron la misión para que que fueron diseñados.
Pero dar otros usos a esos objetos, no solo agudiza la imaginación sino que nos permite tener otros objetos muy prácticos y decorativos para usarlos una vez más.
Por no decir, que evitamos contaminar reduciendo los residuos que generamos, con lo cual nuestra conciencia ecológica también se queda más tranquila.
A mi me parece super divertido imaginar para que puede servir las cositas que normalmente se suelen tirar: latas, botes, tarros, etc.
En esta ocasión os enseño un DIY hecho con ese accesorio plástico que suelen venir en las macetas cuando te compras una planta trepadora. En esta ocasión se trata de un jazmín que compré para la terraza, ya que me chifla el olor a jazmín que produce en las noches de verano.
Me encontré con esa pieza y en lugar de tirarla, lo que hice fue enrollar alrededor una cuerda de rafia que tenía por casa. La forré completamente, y en la parte de abajo, crucé los hilos para formar una estrella.
Una manera muy fácil de conseguir una cestita multiusos de lo más molona. ¿No es perfecta para tener recogidos los juguetes de los peques?
Es tan sencillo, que no hay tutorial con los pasos a seguir, porque no tiene nada de complicación: se ata la cuerda al extremo desde el que comenzamos a enrollar y se va dando vueltas, hasta cubrir toda la parte plástica. Cuando se llega al final, se corta la cuerda y se ata con un nudo fuerte, para evitar que se desenrolle.
Si queremos que nuestra cestita se pueda colgar, le haremos con cuerda una especie de loop como podéis ver en la foto. Es opcional.
Otra variante puede ser hacer lo mismo enrollando lana del color que más os guste, así podemos obtener una cestita rosa, azul, amarilla... Yo últimamente me siento atraída por todo todo lo que me recuerde a la decoración estilo nórdico: rafia, sisal, yute, madera, piedra, colores neutros... por eso lo hice con cuerda natural.
Y los usos pueden ser de lo más variados: como cesta de baño, para guardar nuestros productos cosméticos.
Como frutero para presentar en la mesa alguna frutas de una manera original.
Y también es perfecta para presentar el pan en la mesa.
¿Y vosotros? ¿Que uso le daríais? ¿Se os ocurren otros?
¡¡Si os ha gustado y os animáis a hacerla no olvidéis compartir vuestras fotos en facebook.
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Rocío
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