miércoles, 12 de julio de 2017

13 MESES

¡¡Cuanto tiempo sin pasar por aquí!! Han pasado tantas cosas en estos meses... han sido tantas las emociones, tanta intensidad con la que hemos vivido y tan poco tiempo libre...

A modo de resumen, os contaré que Andrea nació el 12 de Junio. Con 38 semanas y 2 días de gestación. Sana y preciosa. Fue por cesárea porque ya os conté que venía de nalgas. Me la habían programado para el día 16, pero el domingo 12 rompí aguas de buena mañana y ese día la conocimos.

¡¡Hace ya 13 meses de ese fabuloso momento!! No os puedo contar con palabras lo que sentí. Fue maravilloso. Un sueño hecho realidad por fin. La estancia en el hospital fue muy dura para mi. Lo pasé muy mal con la cesárea. La peque también tuvo dificultades con el enganche al pecho y lloraba todo el tiempo. Nosotros, como padres primerizos andábamos desbordados.

Los meses fueron pasando y poco a poco fuimos conociéndonos un poco más. Andrea es una niña simpatiquísima, muy despierta y cariñosa. Pero eso sí, nos ha roto todos los esquemas de lo que suponíamos que hacen los bebés.

Nunca le gustó el carrito de paseo, desde que nació la única forma de llevarla es porteando. Las cunas, mini-cunas, hamacas... las ha considerado siempre "instrumentos de tortura". No ha consentido quedarse en ninguna superficie distinta a los brazos de mamá.

Era dejarla en la cunita que le hizo su papi con tanto cariño, y despertarse y llorar como loca. Así que los primeros meses dormía siempre sobre mi pecho. Se pasaba 24 horas encima. Tampoco hacía buenas migas con nadie y prefería estar con mami.

Por un lado, agotador, por otro... encantador. Nos hemos necesitado tanto... Sentirla, olerla, acunarla, han sido regalos de incalculable valor.

El coche tampoco le ha gustado nada. Ha llorado desconsoladamente cada vez que hemos tenido que hacer algún viaje. ¡¡Aunque fuera al supermercado de al lado!!



Como podréis imaginar, con esta niña de alta demanda que ha pedido brazos a todas horas, ha sido materialmente imposible que me pudiese incorporar a mi ritmo habitual de trabajo en Con lluvia y con sol Shop. ¡¡Ni siquiera me dejaba tiempo para poder hacer las tareas de casa!! Así que cuando volvimos a la actividad en Septiembre del año pasado, fue Jorge el que tuvo que llevarlo casi todo.

Desde entonces he vivido un periodo donde he estado a medio gas, porque Andrea ha sido siempre nuestra prioridad y atenderla me ha ocupado todo el tiempo. Después de todo, solo podría vivir sus primeros meses, una vez en la vida. Ha sido un privilegio poder estar a su lado todo este tiempo.

¡¡13 meses que han pasado volando!! Cada día hace un descubrimiento nuevo, y yo me derrito. Ser madre ha sido mucho más gratificante de lo que jamás imaginé. También es cierto que ha sido mucho más absorbente y extenuante de lo que jamás pensé, pero merece la pena. Sin duda, han sido los 13 meses más felices de mi vida. ¡¡GRACIAS ANDREA POR EXISTIR!!

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Rocío

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